CAMBIOS

Me siento bien nana nana nana na

Podría decir que es casualidad, pero no.

A partir de febrero Samuel ha entrado en los turnos rotativos. No estará siempre de noches.

Y es un gran alivio porque realmente era una situación que me estaba quemando un poco. Cuando sabes que para salir a cenar, quedar con amigos, tomar una copa, dormir juntos... no puede ser cualquier día. Siempre mirando el cuadrante y casi siempre con los descansos entre semana.

Mal asunto cuando se madruga.

Ya una vez se quitó de eso y tuvo que volver. Lo asumo, pero lo que dure pienso disfrutarlo.

Y lo estoy haciendo.

No llega a una semana que ha cambiado y mis ánimos están por las nubes.

Mi buen humor se une o repercute a que mi malestar casi no exista y sobre todo hace la vida de pareja mucho más llevadera.

Y al estar nosotros mejor yo me siento mejor y él también y nos va mejor.

Ya lo sé, ya sé que sólo han pasado unos días, pero tengo muchísima ilusión.

Y os lo iré contando.