El portátil de mi chico ha muerto y no se le ocurre otra cosa que decirme que como él está de vacaciones y yo currando, que no voy a usar el mío, que se lo deje.
Seguro que se lo dejo sí, y seguro que no me mira hasta la última carpeta.
Mi vida real es como estar actuando. Aquí escribo lo que ocurre cuando se baja el telón.