jueves, 6 de septiembre de 2007

DIJISTE QUE ME LLAMARÍAS

Y no lo has hecho.
¿Por qué permito que me hagas daño con lo mismo una y otra vez?
Cuando dijiste que me ibas a llamar, enseguida te contesté que lo dijeras sólo si ibas a hacerlo, y me diste una seguridad.
Llegó el día y yo con mi móvil a todas partes.
Pasó el día y nada. Silencio.
Ni llamar, ni sms. Nada.
Como diría HSolo: odio el silencio.
No puedo con el silencio.
La frase "que hablen, aunque sea bien" se ajusta perfectamente a lo que siento.
Necesito ser a veces el centro de atención. Pasar desapercibida me parece profundamente triste.
Hubiera preferido una de las conversaciones tan dolorosas que mantenemos últimamente y que tanto me arrepiento de haber aguantado cuando acaban.
Pero la indiferencia me supera.
¿No te acordaste?
O, ¿no me has llamado porque sabes que me haría daño?

A ti también te gusta ser mi centro de atención y sabes que así lo conseguirías, pero ¿sabes el daño que me haces?
Espero que no, porque si este daño es premeditado, realmente no tienes corazón.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Ahora sí, ahora no...
¡Cómo me suena la historia!

x07Wave dijo...

yo acabo pasar por el mismo royo. y jode.