Retomando el tema, vuelvo a decir (atento Mid) que me parece mal fisgonear en las cosas personales de los demás y además es que no va conmigo. No soy persona de querer saber lo que no le importa.
Pero la curiosidad va a matarme cual gato.
Le saqué el tema.
Le dije que como me había dado el teléfono con las prisas pues que no le había dado tiempo de revisarlo y que le echara un vistazo para ver si quería borrar algo o pasarse cosas al ordenador o lo que fuera.
A parte de decirme que no borrara nada y que ahí sólo podía haber cosas nuestras, me demostró que tiene mala, malísima memoria.
Al parecer cree que compró el móvil estando juntos, pero yo recuerdo perfectamente que lo tuvo un tiempo antes, muy poco tiempo antes.
Además me he dado cuenta de que no es sólo que confíe ciegamente en que no miraré lo que no me corresponde, sino que no tiene secretos para mí, o sea, que no tiene reparos en que yo le abra su correo o conteste a su teléfono.
Así que me siento doblemente culpable, por luchar contra la curiosidad que tengo por bichear el móvil de punta a cabo y por no ser tan ... no me sale la palabra, pero que hay determinadas cosas que no quiero ni imaginarme que él pudiera saber.
Seguiré con la lucha entre mi ángel y mi demonio.
P.D. Sé que no voy a encontrar nada "comprometido".